La respiración nasal libre es garantía de salud y de una alta calidad de vida. Una de las causas más comunes de trastornos respiratorios nasales sistemáticos es un tabique desviado. Este problema no se puede resolver con gotas y tabletas. Sólo la cirugía plástica puede ayudar aquí.
¿Por qué se necesita un tabique nasal?
El tabique nasal es una placa que incluye secciones de hueso y cartílago, cubiertas con una membrana mucosa. Ella divide la nariz en dos partes. Esta característica de la estructura anatómica no es accidental.
La nariz es necesaria para filtrar y calentar el aire. Si fuera una sola cavidad, se agotaría rápidamente y no podría realizar sus funciones en su totalidad. Gracias a la partición, cada mitad de la nariz funciona por turnos, lo que garantiza una filtración de aire continua.
Además, el tabique nasal soporta la forma de la nariz, siendo su esqueleto.
Síntomas de la curvatura
Un paciente con esta patología se preocupa por:
- congestión nasal;
- dolores de cabeza;
- boca seca después de dormir;
- sangrado;
- frecuentes enfermedades inflamatorias de la nariz y del tracto respiratorio superior (faringitis, amigdalitis, bronquitis);
- disminución de la capacidad de trabajo, calidad de vida;
- rápida fatigabilidad.
El cirujano plástico cita las siguientes estadísticas:
Según estudios recientes, menos del 25% de las personas en el mundo tienen un tabique parejo. A muchos de ellos no les molesta nada, ya que la curvatura es insignificante y no interfiere con la respiración por la nariz. Este grupo de pacientes no requiere ninguna terapia. Sin embargo, si estos síntomas están presentes, entonces esta es una indicación directa para el tratamiento quirúrgico: septoplastia.
¿Cómo se realiza la cirugía de corrección del tabique nasal?
Antes de la septoplastia, es necesario realizar una consulta con un otorrinolaringólogo y un examen completo. Primero, se realiza una tomografía computarizada. Le permite estudiar completamente la estructura del tabique, determinar el alcance de la operación. También tendrás que pasar varias pruebas:
- análisis clínicos de sangre y orina;
- química de la sangre;
- coagulación;
- sangre para una serie de infecciones (sífilis, hepatitis viral, VIH);
- cardiograma;
- fluorografía.
Todo esto es necesario para excluir posibles contraindicaciones para la intervención quirúrgica.
La corrección del tabique nasal se realiza bajo anestesia con la adición de un anestésico local. Después de la anestesia, el cirujano realiza la intervención según un algoritmo claro:
- Abre la mucosa nasal. La incisión se realiza en la cavidad nasal, lo que elimina por completo la presencia de un defecto estético tras la operación.
- Otras acciones dependen del tipo de defecto. Si hay una espiga o cresta aislada, entonces se elimina. Si la curvatura es compleja, en forma de S, entonces la partición se destruye parcialmente y se "crea" nuevamente.
- Coser la mucosa. Se aplican hilos autoabsorbibles.
- Se insertan férulas de silicona en el conducto nasal y se suturan. Se trata de placas que mantienen la forma correcta del tabique nasal, previenen el desarrollo de hematoma septal y aceleran el proceso de cicatrización.
La duración de la plastia del tabique nasal depende completamente de la complejidad y la cantidad de trabajo y puede variar de 40 minutos a 2 horas.
Después de los procedimientos quirúrgicos, el paciente debe pasar 1-2 días en el hospital.
Rehabilitación después de la cirugía para corregir el tabique
Después de la operación, el paciente necesita un régimen estacionario. Se prescriben antibacterianos, terapia hemostática y analgésicos. También es necesario cuidar las férulas, lavándolas constantemente con soluciones salinas. Después de la septoplastia pueden aparecer hematomas e hinchazón en la cara, que desaparecen a los 3-5 días. Durante este período, la respiración nasal es difícil debido a la hinchazón en la cavidad nasal y las férulas.
Las férulas se retiran en el día 7-10. La respiración nasal mejora, pero no del todo debido a la hinchazón continua.
Después de eso, el paciente debe estar en casa en reposo durante otros 4-5 días. En las primeras 2 semanas necesitas:
- renunciar a baños calientes, saunas, baños;
- limitar la actividad física;
- no se suene la nariz con fuerza;
- limite dormir boca arriba y usar anteojos.
El médico también puede recomendar el uso de gotas y aerosoles destinados a acelerar la curación de la mucosa y restaurar el epitelio en la cavidad nasal.
El resultado final se puede valorar a los 2-3 meses, cuando el edema desaparece por completo y se completan los procesos de cicatrización.